¿Cómo trabaja Bodegas Real el enoturismo?
Dándole la máxima importancia. Es una línea de actividad estratégica para nosotros. Hace tiempo que Bodegas Real dejó de ser solamente una bodega con vocación exportadora en la que se hace vino de calidad. Ahora , además de todo eso, somos una bodega abierta a todo el mundo. No es que seamos visitables, es que nos encanta que venga la gente y a la gente le encanta venir.
¿Cuáles son los atractivos con los que cuenta Bodegas Real y su restaurante El Umbráculo?
Tenemos la suerte de trabajar en un sector que combina vino , naturaleza, gastronomía y ocio. ¿A quién no le atrae algunos de esos elementos? A todo el mundo le gusta pasarlo bien, desconectar por un rato de los problemas y de las rutinas. Es lo que ofrecemos , pero hay que hacerlo bien, con calidad en todos los frentes, el servicio, la cocina, los vinos. De una manera profesional pero natural y cercana.
¿Cuál es vuestra filosofía?
Conseguir que la gente se lo pase bien. Conocemos muchos ejemplos de éxito de destinos enoturístico en el mundo. A Valdepeñas por historia y por tradición le corresponde ser uno de ellos.
Debemos importar lo mejor de esos modelos y adaptarlos a nuestras circunstancias. En el vino hablamos mucho del “terruño” que es conseguir que los vinos proyecten las características únicas de donde se han elaborado. En el turismo también tenemos que trasmitir autenticidad.
¿Qué ventajas o particularidades tiene celebrar una boda en Bodegas Real?
En primer lugar todos y cada uno de los que trabajamos en Bodegas Real somos conscientes de que estamos organizando uno de los días mas importantes en la vida de los novios y todo tiene que salir perfecto. Ya tenemos 7 años de experiencia pero cada boda es como la primera.
El entorno es muy especial. Realmente uno se está casando en el campo , rodeado de viñedos, pero con todas las comodidades.
Solo hay una boda por día, y tenemos una gran flexibilidad para adaptarnos a las necesidades de los clientes. Prestamos especial atención a los menús que están en continua renovación
¿Por qué dirías que hay que elegir Bodegas Real para celebrar una boda?
Uno nunca se olvida del día de su boda. Esos recuerdos duran para siempre. Eso es una gran responsabilidad para los que la organizamos. En Bodegas Real tenemos muy presente la gran confianza que la pareja demuestra tener en nosotros al elegirnos.
Nuestra prioridad es que tanto los novios como sus invitados pasen un día inolvidable. Para ello tenemos la suerte de contar con un entorno y un paisaje únicos, pero lo más importante, es que todo el equipo de la bodega compartimos la misma visión en el sentido de saber escuchar a los clientes, adaptarnos a sus necesidades y estar pendiente de todos los detalles.
En general, ¿la apuesta que se hace por el enoturismo en la comarca de Valdepeñas no es suficiente?
Hay conciencia de ello y voluntad de hacer cosas, pero hay que hacer mucho más, porque tenemos potencial. Tenemos unos ingredientes que otras zonas no tienen, que debemos poner en valor. No solo es que tengamos mucho que enseñar, es que a nivel de comunicación , la notoriedad que tiene Valdepeñas en toda España como región vinícola es enorme. Su vertiente enoturística podría aprovecharse de esa parte del camino ya andado.
¿Cómo ha ido la cosecha este año?
Va a ser un año de novedades. Digamos que se ha incorporado un gran fichaje al departamento técnico que sin duda influirá en la calidad de los vinos. Además estamos renovando la imagen de los vinos, llegarán referencias nuevas y todo ello coincidiendo con un año especialmente propicio por la calidad de la uva que ha entrado en la bodega. Pensamos que nuestros vinos darán que hablar en 2015 en todos los foros, demostrando, una vez más, que la comarca es origen de grandes vinos.
