jueves. 18.04.2024

Ángela viene a las Fiestas del Vino de Valdepeñas para hacer, en el acto Institucional, el Brindis Poético. advaldepeñas la ha entrevistado y nos ha confesado que adora esta ciudad y que no le importaría vivir aquí, a nosotros tampoco porque la admiramos.

Eres poeta y novelista. ¿Con qué género te sientes más cómoda?

Me gustan todos los géneros literarios, en unos o en otros encuentro siempre algo que me hace aprender, porque escribir es sobre todo aprender, al igual que leer. Y, para mí, la escritura también es un proceso de lectura. La novela es un trabajo a largo plazo, como construir un edificio. La poesía es la iluminación, el destello, lo mismo que el relato. El ensayo es un género noble que destila el pensamiento de una época... Los disfruto todos, la verdad.

De alguna manera eres experta en diversos géneros, novela juvenil con la que comenzaste, poesía y novela más de adultos con temática más compleja, como es el caso de Los Estado Carenciales. ¿Crees que de la complejidad de las personas podemos sacar innumerables historias?

Por supuesto, las personas sencillas son las que viven las grandes historias, como enseñan los cuentos populares. Las protagonistas de la gran aventura del ser humano. Tomados de uno en uno, historia por historia, conocemos la odisea de la especie, sus miserias y grandeza.

¿Cómo es el entorno donde te sientas y de repente construyes una historia, unos personajes?

Primero voy madurando ideas durante meses. Cuando van tomando cuerpo, aparecen los personajes. Vivo con ellos durante mucho tiempo. ¡Nunca me siento sola! Y, para escribir las historias prefiero mi pequeño despacho, en casa. Antes me arreglaba en cualquier sitio, pero me voy volviendo exigente y quisquillosa y me gusta estar en un ambiente familiar, rodeada de mis libros.

Antropóloga, filósofa e historiadora. ¿Utilizas estas tres disciplinas para crear un universo poético o novelístico?

Sí, claro que sí, cuando escribes utilizas todo lo que sabes, elaboras lo aprendido y le sacas provecho. Recuerdo que cuando era estudiante pensaba: "saber esto y lo otro nunca me servirá de nada", ¡qué equivocada estaba!, la educación es preciosa, tarde o temprano acude en tu ayuda. Y siempre necesitamos ayuda, durante toda la vida, de modo que... mejor estar bien pertrechados de educación y conocimientos que no tener dónde echar mano.

 Eres de San Lorenzo de Calatrava pero ¿vienes mucho por Ciudad Real? ¿Qué te inspira tu tierra?

Me inspira y me gusta mucho, escribí incluso un libro sobre ella: "El viaje de una hoja de lechuga" (Imagine ed.), que disfruté mucho, mucho, mucho... Me encantó escribirlo. A veces pienso que debería escribir otro porque hay muchos lugares que se me quedaron en el tintero.

¿Qué han supuesto para ti tantos premios importantes como por ejemplo el Nadal o ser  finalista del Planeta?

Los premios son la modesta manera que tiene un escritor de ir construyendo una carrera, los que tengo representan para mí etapas de mi vida, no solo profesional sino personal, estoy agradecida por tenerlos, me siento afortunada.

¿Eres sarcástica en tu vida cotidiana?

Mucho más que en la literatura. Soy insoportable, en realidad. Parezco una máquina de hacer frases, como las de esas galletas chinas... Pero también procuro no herir a nadie, y hacer reír a la mayoría para aliviarles la carga que supone aguantarme.

¿Crees que la mujer ya ha encontrado su sitio en la sociedad o todavía nos queda mucho camino por recorrer?

El camino es largo, y la meta ni siquiera está a la vista. Aparentemente somos una sociedad no sexista, pero la verdad es otro cantar. Entre una mujer bien capacitada y con talento y un hombre que sea todo lo contrario, siempre es el hombre el elegido para cualquier puesto.

¿Conoces Valdepeñas y sus Fiestas del Vino?

Claro que conozco Valdepeñas, es una ciudad muy importante en mi biografía y en mi vida. Entrañable y querida por mí como pocas. El día menos pensado me vengo aquí a vivir.

La Velocidad del Mundo es tu último trabajo de poesía. ¿Eres más tú en esta obra? Al menos la crítica así lo piensa...

La poesía siempre habla en primera persona, aunque se utilicen otras voces interpuestas, por eso puede que sea más transparente. Cada vez que logro publicar un libro de poemas me parece que ha ocurrido un milagro. Y, en estos tiempos, más.

Háblanos de tus proyectos de futuro o inminentes.

Tengo acabada una novela y espero ilusionada su edición. Quién sabe cuándo. Me gustaría que cuanto antes mejor, pero el mercado editorial —como todo lo demás— no está muy boyante. Confío en que pronto acaben estos tiempos tristes y tengamos oportunidades de celebrar y brindar. Mi brindis en Valdepeñas es una alegría. Me gustaría que tuviésemos más ocasiones como esta, más a menudo, todos los días... ¡Brindemos por el futuro!

Ángela Vallvey: “¡Brindemos por el futuro!”