Ingredientes:
6 huevos
1 litro de leche
600 gramos de harina
Abundante aceite de girasol para freír
Azúcar y canela mezcladas al gusto para rebozar
Batimos los huevos y les añadimos la leche y harina. Mezclamos todo bien hasta que no queden grumos.
Ponemos al fuego una sartén que sea honda o una tartera con abundante aceite, ponemos dentro el molde para hacer las flores para que se caliente con el aceite.
Una vez esté el aceite bien caliente sacamos el molde del aceite, dejamos que escurra el aceite sobrante y lo sumergimos dentro de la masa que teníamos reservada dejando solo medio centímetro fuera. Lo metemos en el aceite sin que llegue a tocar el fondo de la sartén, entonces el aceite subirá como la espuma envolviendo toda la flor. Pasados unos segundos subiremos despacio el molde para que la flor caiga, volvemos a dejar el molde en la sartén para que no pierda temperatura y doramos por ambos lados. Pasamos a un papel absorbente para quitarle el exceso de aceite y una vez templada la pasamos por la mezcla de azúcar y canela.
Y ya están listas.
Toñi nos dice que son fáciles de hacer y que están buenísimas, nosotros nos lo creemos.
También cuenta Toñi que la mano experta de esta exquisita receta es la de su madre, una buena profesora.