María Ortega Rivas ha explicado, a quien suscribe, que no ha puesto denuncia alguna por una rotura en un cristal de la puerta de su vivienda, ya que considera que fue un acto que no puede considerarse vandálico sino fruto de la casualidad.
Asimismo, que efectivamente, se encuentra molesta por la celebración de la victoria del partido socialista a las puertas del local donde se encontraban cenando tras el cierre de las urnas.
Tal celebración, en ningún momento, fue amenazante ni intimidatoria como afirma la noticia; debiendo tenerse en cuenta que el bar-restaurante donde se encontraban los miembros del Partido Popular está ubicado en las inmediaciones y es paso obligado hacia la terraza donde también se encontraban varios miembros del Partido Socialista, tras la jornada electoral del 24 de Mayo, y que únicamente se pasó cantando con motivo de la efusividad por haber ganado las elecciones.
Quiero hacer público finalmente que ha sido una campaña limpia y ejemplar, en la que en ningún momento se ha faltado al respeto ni insultado ni a ella ni a ninguna de las personas de su candidatura o vinculadas al Partido Popular, simplemente se utilizaron argumentos para dar a conocer, en campaña electoral, que parte de su programa del PP era un plagio del programa del PSOE de hace 4 años, sin faltar al respeto, insultar ni vejar a nadie.