viernes. 29.03.2024

Esta enfermedad del ojo consiste en el crecimiento de vasos anómalos en la parte más noble de la retina, sangrado de los mismos y pérdida progresiva de la agudeza visual y visión central.Su aparición está relacionada con la hipertensión, la hipercolesterolemia, la obesidad, el tabaquismo y la exposición solar; y suele ser menos frecuente en la población que consume mucha fruta, verdura y pescado azul.

El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) ha puesto a disposición, tanto de pacientes castellano-manchegos como de otras comunidades autónomas con esta enfermedad, un protocolo elaborado en 2006 conjuntamente por los Servicios de Oftalmología y de Farmacia del Hospital ‘La Mancha Centro’, y posteriormente aprobado por la Comisión de Farmacia y Terapéutica del mismo centro. Desde entonces, se ha proporcionado la mayor seguridad clínica y calidad visual posible, evitando numerosos casos de ceguera.

El protocolo de tratamiento de la DMAE húmeda del hospital alcazareño consiste en la administración dentro del vítreo del paciente de una serie de sustancias que inhiben los factores de crecimiento vascular endotelial. Se inyecta en el ojo del paciente en condiciones de asepsia, a través de cirugía sin ingreso y sin dañar la retina ni el cristalino. Los miembros del Servicio de Oftalmología utilizan para ello todos los fármacos antifactor del crecimiento del endotelio vascular disponibles, conocidos como Anti-VEGF.

Una vez seleccionada la sustancia adecuada en función de la enfermedad y el tipo de paciente, el tratamiento de ataque consiste en el suministro de tres inyecciones intravítreas, una cada mes. Si la degeneración macular rebrota, se repite otros tres meses más. El seguimiento de los usuarios con esta patología se realiza en una consulta específica disponible en el Hospital de Alcázar de San Juan, lo que permite valorar mejor su evolución.

Objetivo: que se beneficien más pacientes

Desde que el Hospital ‘La Mancha Centro’ comenzara a aplicar hace siete años el protocolo de tratamiento de la DMAE húmeda, se han registrado resultados clínicos muy satisfactorios y un importante ahorro, cifrado en unos 3 millones de euros. Esto ha llevado al SESCAM a crear un grupo de trabajo que tiene como objetivo trasladar su aplicación a otros hospitales para que un mayor número de pacientes pueda beneficiarse del protocolo.

El Servicio de Oftalmología del hospital alcazareño fue uno de los primeros centros públicos del país en aplicar tratamientos para la degeneración macular asociada a la edad gracias a la incorporación de la terapia fotodinámica. Esta técnica fue sustituida por la que se aplica en la actualidad una vez que fueron introducidas las nuevas sustancias Anti-VEGF, las cuales han mejorado aún más los resultados.

El ‘Mancha Centro’ lidera la lucha contra la principal causa de ceguera en el primer mundo