Además ha recordado que este laboratorio ya prestaba servicio desde 1927 hasta que fue cerrado por el anterior Gobierno en 2012, lo que supuso el despido de 7 trabajadoras a las que ahora se les va a dar la posibilidad de volverse a incorporar a la actividad.
El objetivo de todo esto, “además de traer ese laboratorio donde están los agricultores”, es conseguir es la acreditación del centro, según ha afirmado Martínez Arroyo que ha insistido, “no podemos salir fuera de Castilla-La Mancha diciendo que no tenemos un laboratorio público acreditado en calidad de vino, eso es una auténtica vergüenza en los tiempos que corren y, por tanto, ese es el objetivo para los próximos años".
En palabras del consejero, la Estación de Viticultura y Enología (EVE) vuelve a Alcázar de San Juan “donde siempre estuvo” para cumplir tres compromisos: con el sector del viñedo, con lo público y con el programa electoral del propio presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. Para ello, se pondrá en marcha en las próximas semanas con el nombramiento del director, Alipio Lara que fue trabajador de la propia EVE y se invertirán 250.000 euros para volver a crear el laboratorio para que esté en funcionamiento este verano.
Durante los años que estuvo cerrada la Enológica, “las bodegas de Castilla-La Mancha se tenían que trasladar a la Estación Enológica de Haro, en La Rioja para hacer las analíticas del vino”, según ha asegurado el consejero. “Esto, aunque es perfectamente legítimo, desde el Gobierno de Castilla-La Mancha creemos que tenemos que tener una Estación Enológica pública”, ha añadido.
No nos vamos a parar en el Alto Guadiana
A preguntas de los periodistas, respecto a la prórroga del Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG) aprobada por el Gobierno en funciones, el consejero ha respondido que "vamos a ver qué sucede en las próximas semanas en el seno del Gobierno a nivel nacional, en el seno del Ministerio de Agricultura y, posteriormente, a nivel de la Confederación (CHG) pero no nos vamos a quedar parados”.
En este sentido ha aclarado, “tenemos que trabajar desde ya para que esos agricultores profesionales tengan un futuro y yo siempre he mencionado la importancia que los agricultores tienen en esta zona. Es muy importante que haya agua, estos agricultores tienen futuro si tienen acceso al agua y en la medida en que esos agricultores tengan futuro, lo tendrá la industria agroalimentaria que es el sector económico más importante de Castilla-La Mancha".
