Y es que medio siglo da para mucho. El auditorio ‘Tomás Barrera’ acogió el acto institucional de la efeméride como culminación a un amplio abanico de actividades preparadas y celebradas en los últimos meses. Cientos de personas, la mayor parte antiguos alumnos, profesores y trabajadores del centro a lo largo de estas cinco décadas, se citaron para seguir el evento.
Tres antiguos alumnos presentaron la gala, Aurelio Maroto, Juan Pedro Araque y Rosa Salcedo. Ellos fueron introduciendo los momentos de un denso programa, que arrancó con unos bellos versos de Gerardo Diego, leídos por Paqui Jaime. Al piano, Gema Sánchez, que junto a María Muñoz y Cristina Rodríguez con la flauta travesera, amenizaron el acto en muchos de sus momentos.
El Cronista Oficial de la Villa, Paulino Sánchez, abrió el turno de intervenciones con un resumen histórico de estos cincuenta años. Nadie mejor para repasar los inicios, con los avatares de la primera Sección Delegada, y algunos momentos clave, por ejemplo la independencia como Instituto ‘Modesto Navarro’, el recurrente problema de las grietas, la llegada de la ESO o la división y nacimiento del IES Clara Campoamor.
También intervino Inmaculada Navarro, nieta de Modesto Navarro. Explicó cómo su abuelo decidió donar una hectárea de terreno al Ayuntamiento para la construcción del instituto, a cambio de que llevara el nombre del donante. Esto no sucedió hasta que el centro se independizó del instituto de Valdepeñas, en el año 1975.
Tras un vídeo con un recorrido fotográfico por la historia del instituto, desde el comienzo de las obras en 1966 hasta hoy, subió al atril el jefe de estudios actual, Eladio Maleno, que expresó su gratitud a cuantos habían asistido, pero también a aquellos que no habían podido hacerlo y se habían excusado.
Otra proyección precedió el homenaje a los directores, en representación de los diferentes claustros de este medio siglo. Había cinco presentes, que subieron al escenario para recibir un detalle y dirigirse al público. Tomaron la palabra Antonio Romero, Herminio Ureña, Dominica Serrano, Jesús Labajo y Francisco Ruíz Flores. Todos coincidieron en los valores que representa el IES Modesto Navarro y la gran experiencia vital que el centro ha supuesto para ellos.
El alcalde y antiguo alumno, Luis Díaz-Cacho, ponderó la importancia la formación académica y humana que el instituto ha brindado a tantos jóvenes de La Solana y comarca. Tuvo un recuerdo especial para aquellos que, desgraciadamente, nos dejaron para siempre.
Después de otro vídeo con imágenes de diferentes generaciones de alumnos, habló Pepa Campillo, representando a los muchos alumnos de Alhambra, San Carlos del Valle, y también algunos de Ruidera y Membrilla. Dijo que en esas aulas aprendieron el significado de palabras como justicia, compañerismo o educación, además de rememorar situaciones que hoy nos parecen cómicas, como cuando asaban la mortadela sobre la estufa de butano para comerse el tentempié.
La pantalla volvió a proyectar imágenes, primero sobre las distintas jornadas culturales, teatros o excursiones realizadas, y después sobre los musicales montados en los últimos años. A continuación, el profesor de dibujo, José Crespo, habló sobre la revista digital del centro, ‘Galanea’, y presentó el número dedicado a este aniversario.
Tras un recordatorio acerca de la dimensión europea del IES Modesto Navarro, a través de los programas de intercambio Comenius y Erasmus Plus, el acto enfiló su epílogo. Primero a través de un último montaje fotográfico de los alumnos del presente curso, con saludo incluido, y después con la irrupción en el escenario de la comisión organizadora de los actos de esta importante efeméride. Una de sus componentes, Pepi Palacios, a la sazón profesora de inglés, lanzó un gracias general a todos cuantos, de una forma u otra, habían ayudado, en especial a Eladio Maleno, “nuestro gladiador” –dijo-. Precisamente con la banda sonora de Gladiator inundando el auditorio acabó la gala, entre los aplausos de un público entregado a la causa.
