viernes. 29.03.2024
REGIóN

La Guardia Civil detiene a 23 personas relacionadas con el hurto de más de trescientas toneladas de aceitunas en Ciudad Real y Toledo

La Guardia Civil de las provincias castellano manchegas de Toledo y Ciudad Real ha detenido a 23 personas y ha investigado a otras 12 por su relación con un elevado número de hurtos de aceitunas cometidos en olivares de Toledo, Ciudad Real, Cáceres, Jaén, Córdoba y Málaga, donde sustrajeron más de trescientas toneladas de este fruto que habrían sido vendidas en almazaras de Ciudad Real y Badajoz.

Cinco personas relacionadas con estas almazaras también han sido detenidas por la Guardia Civil, que ha recuperado materialmente dieciocho toneladas de aceitunas y ha incautado varios vehículos y efectos empleados para recolectar el fruto sobre el terreno.

Operación MALOLIVA en Ciudad Real

Esta operación se inició el pasado mes de diciembre por la Guardia Civil de Manzanares y en ella ha intervenido su equipo ROCA, cuyas primeras actuaciones fueron dirigidas a investigar varios hurtos de aceitunas que se habían producido en esa comarca durante ese mismo mes.

Como consecuencia de estos hechos, la Guardia Civil diseñó un operativo conjunto entre equipos uniformados y otros que actuaban en vehículos camuflados para vigilar el campo y tratar de detener a sus autores, detectando la presencia nocturna de un vehículo monovolumen oscuro que, no obstante, no pudo ser inicialmente identificado. Unas horas después de este avistamiento fue denunciado un hurto de aceitunas en una zona muy próxima al lugar donde se había producido aquel.

Las vigilancias sobre el terreno se intensificaron hasta que, apenas unos días después de este primer avistamiento y en plena noche, efectivos de la Guardia Civil pararon un vehículo ocupado por tres personas con antecedentes por delitos cometidos en explotaciones agrícolas, descubriendo tres cerdos ibéricos, recientemente sacrificados, en el maletero. El titular de la explotación fue avisado del hecho por la Guardia Civil y denunció un delito de hurto.

La Guardia Civil de Manzanares estableció una posible relación entre estas tres personas y los hurtos de aceitunas que venían produciéndose en la zona, al averiguar que estas tres personas también utilizaban un monovolumen de las mismas características que el avistado unas noches atrás.

A raíz de estas investigaciones, ambos vehículos fueron controlados y ubicados en días sucesivos en zonas próximas a explotaciones agrícolas de las provincias de Ciudad Real, Córdoba, Jaén y Málaga, en alguna de las cuales fueron sorprendidos cuando hurtaban aceitunas.

La información obtenida por la Guardia Civil permitió establecer que las tres personas identificadas anteriormente, junto con otras tres, conformaban un grupo criminal que tenía su base de operaciones en Manzanares y que actuaba en varias provincias, vendiendo después la aceituna sustraída en una almazara de la localidad ciudadrealeña de Malagón. También permitió averiguar que, en ocasiones aisladas, los integrantes de este grupo criminal cometían los hurtos junto con otras personas distintas, que también disponían de otro monovolumen, por lo que estos nuevos actores fueron sometidos también a investigación.

Esta nueva línea de investigación, simultánea a la anterior, determinó que existía otro grupo criminal, más numeroso que el primero, que tenía su residencia en la localidad ciudadrealeña de Llanos del Caudillo, desde donde sus integrantes partían en varios de los cuatro vehículos que utilizaban para cometer hurtos similares en las mismas zonas de actuación que el otro grupo.

Durante esta fase de investigación fueron detenidos varios miembros de ambos grupos delictivos, a los que se les incautaron 5.500 kilos de aceitunas en varias actuaciones distintas, alguna de ellas realizada cuando iban a entregar las aceitunas sustraídas en la misma almazara.

El modus operandi de ambos grupos era idéntico y consistía en trasladarse desde cada una de sus localidades de origen hasta la zona en la que pensaban cometer los hurtos. Una vez en ella, aprovechando las horas diurnas, ubicaban la finca concreta donde, ya caída la noche, iniciaban la recogida del fruto y lo introducían en sacos. Durante esa misma mañana se desprendían del producto del delito, entregándolo en la almazara para tratar de evitar ser detenidos en una actuación policial.

Como consecuencia de estas investigaciones y en una primera fase de explotación de la operación MALOLIVA, fueron detenidas las siguientes personas, a las que se imputaron numerosos delitos de hurto y uno de pertenencia a grupo criminal:

GRUPO DELICTIVO DE MANZANARES: DAZ, DIZ, LZ, MSL. En relación con este grupo delictivo también fueron investigados CIC y IC, todos ellos de nacionalidad rumana.

GRUPO DELICTIVO DE LLANOS DEL CAUDILLO: NP, DP, ACS, DFM, MB, SMP, SAR, MP, DB y MP, todos ellos de la misma nacionalidad que los anteriores.

Varios de los detenidos cuentan con antecedentes previos por otros hechos delictivos.

La Guardia Civil también ha intervenido cinco vehículos empleados para cometer los hechos delictivos, así como útiles para recoger aceituna, tales como mantas, varas, cepillos y espuertas.

En la segunda fase de explotación de la operación MALOLIVA, efectivos del Equipo ROCA, del SEPRONA y de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil de Manzanares realizaron una inspección a la almazara en la que los detenidos e investigados vendían las aceitunas sustraídas, lo que permitió poner de manifiesto un importante desfase entre las anotaciones de entradas de aceitunas y el número de litros de aceite obtenido. De este desfase, casi 150.000 kilos, valorados inicialmente en unos 100.000 euros,  habrían sido entregados por los miembros de ambos grupos criminales.

Como consecuencia de todo ello, fueron detenidos JCM, titular de la almazara y JCA y JCCA, todos ellos como receptadores de aceitunas procedentes de los 45 hechos delictivos esclarecidos. Los dos últimos son hijos del titular de la almazara.

La Guardia Civil ha esclarecido 45 hechos delictivos en esta investigación, treinta y cuatro de los cuales se cometieron en la provincia de Jaén, seis en la de Ciudad Real, cinco en la de Málaga y uno en la provincia de Córdoba.

Las localidades afectadas fueron las ciudadrealeñas de Llanos del Caudillo, Manzanares, Malagón, Fuente el Fresno, Aldea del Rey y Almodóvar del Campo; las jiennenses de Bailén, Andújar, Guarromán, Mengíbar, Carboneros, Linares, Alcalá la Real, Jabalquinto, Mancha Real, Marmolejo, Pegalajar, Villacarrillo y Villanueva de la  Reina; las malagueñas de Villanueva del Trabuco, Archidona y Cuevas Bajas y la cordobesa de Montoro.

Diligencias / detenidos

Las diligencias instruidas por la Guardia Civil en la primera fase de explotación de la operación, junto con los detenidos y los efectos intervenidos, fueron entregados en el Juzgado de Instrucción número Uno de Manzanares mientras que, los tres detenidos en la segunda fase y las correspondientes diligencias, fueron entregados en el Juzgado de Instrucción de Guardia de Ciudad Real.

Operación REBUSCO en Toledo

Mientras las investigaciones de la Guardia Civil de Ciudad Real iban avanzando hasta conseguir el desmantelamiento de dos grupos criminales, la Guardia Civil de Toledo iniciaba la denominada Operación REBUSCO, que daba sus primeros pasos a principios de este año.

Al igual que ocurría en Ciudad Real, el Equipo ROCA de Torrijos, apoyado en parte de las investigaciones por el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Talavera de la Reina, iniciaba sus investigaciones al detectar algunos hurtos de aceitunas  y la presencia de varias furgonetas en zonas próximas a explotaciones agrícolas de estas dos comarcas de la provincia de Toledo.

La Guardia Civil estableció diversos operativos, en los que  interceptó varias furgonetas cargadas con aceitunas cuyos ocupantes la habían hurtado de distintas fincas, incautando en estas actuaciones una cantidad que rondaba los 12.000 kilos de aceitunas.

Las investigaciones revelaron el procedimiento empleado por los delincuentes para cometer   los hurtos, variando respecto a los cometidos en la provincia de Ciudad Real en que los cometidos en Toledo se perpetraban a primera hora de la mañana, en lugar de hacerlo durante la noche. Posteriormente trasladaban el fruto hasta un asentamiento ilegal, integrado por un número aproximado de doscientas personas, que pertenecían a varias familias e incluían entre sus miembros a niños de corta edad. Algunos de estos niños viajaban con los autores de los hurtos, cuando cometían estos, para simular una actividad no delictiva.

Para recolectar la aceituna vareaban los árboles, en muchos de los cuales producían graves daños, lo que aumentaba las pérdidas de los agricultores. Después ponían las aceitunas sustraídas a disposición del patriarca, quien negociaba el precio con los intermediarios y repartía el dinero obtenido entre las diferentes familias.

A finales de enero, la Guardia Civil detectó la presencia de un camión de gran tonelaje en el asentamiento,  cuyo conductor cargó gran cantidad de sacos de aceitunas, durante la noche y con las luces apagadas, mientras que varios de los  integrantes de estas familias cortaban todos los caminos de acceso al lugar, interponiendo sus furgonetas para dificultar una hipotética actuación policial. Todos ellos estaban comunicados entre sí a través de teléfono móvil.

El camión inició su viaje tras realizar la carga de los sacos de aceitunas, dirigiéndose hasta una almazara sita en la localidad pacense de Fuenlabrada de los Montes, donde la Guardia Civil lo interceptó y comprobó que transportaba 24.000 kilos de aceitunas, investigando a su conductor. En ese momento fueron intervenidos los 12.000 euros correspondientes al importe de la entrega realizada.

Acto seguido se inspeccionó esta almazara, en la que fueron detectados albaranes de venta de este fruto en los que una mujer, que también fue posteriormente investigada, realizó varias ventas sucesivas que suponían un montante total de 164.000 kilos de aceitunas. En los documentos de entrega constaba que las aceitunas provenían de una explotación sita en la localidad toledana de Pepino, sin que en esta explotación exista un solo olivo. Además, en los albaranes constaba que la aceituna era de “rebusco”, es decir, caída en el suelo, cuando su rendimiento era notablemente superior a este tipo de aceituna y era pagada por la almazara como proveniente de árbol.

La mujer cuyos datos constaban en los albaranes está relacionada con una de las personas con las que el patriarca del asentamiento negociaba la venta de las aceitunas sustraídas y con motivo de su investigación le fue incautado un documento en el que anotaba las entregas realizadas por los integrantes de las distintas familias, todas ellas de nacionalidad portuguesa.

Las investigaciones posteriores permitieron a la Guardia Civil averiguar que esta mujer estaba intentando beneficiarse de un montante superior a 10.000 euros en bonificaciones fiscales al asegurar que la aceituna había sido recogida en el suelo, dado que este tipo de aceituna goza de una subvención específica.

Por otro lado, la Guardia Civil localizó una nave en Cazalegas que había sido alquilada por el titular de una almazara de la  localidad pacense de Solana de Barros, con antecedentes por receptación de aceituna  y sin ninguna  vinculación con la almazara anterior, en la que los autores de los hurtos de aceitunas también vendían el producto de sus delitos.

La situación concreta de esta nave pudo obtenerse gracias a las vigilancias que realizaron los investigadores sobre algunas furgonetas sospechosas de ser utilizadas para el transporte de aceitunas sustraídas. En su interior fueron descubiertos restos de aceitunas.

Como consecuencia de todo ello, la Guardia Civil ha detenido a AGC, LMC, JCG, MES, MHC, TRV, todos ellos de nacionalidad portuguesa y ha investigado a  FAS, JFC, JRV, JC, MCL, JAM, de nacionalidad portuguesa y ARM, CBR, DGM, AGF, de nacionalidad española.

La Guardia Civil ha esclarecido 21 delitos de hurto cometidos en las localidades toledanas de La Mata, Carmena, Mesegar de Tajo, Consuegra, Villatobas, Alcaudete de la Jara, Talavera de la Reina, Malpica de Tajo, Pepino y de las cacereñas de Navalvillar de Ibor y Castañar de Ibor.

 

La Guardia Civil detiene a 23 personas relacionadas con el hurto de más de trescientas...