Así lo ha asegurado tras haber sabido que la Unión Europea ha castigado a Castilla-La Mancha por incumplir la normativa sobre fondos europeos con lo que se perderá el 5% de los fondos FEADER y otro 5% de los fondos FEAGA, lo que, según las propias organizaciones agrarias, se perderán unos 70 millones de euros.
Pero esta pérdida hay que sumarla a los 150 millones de euros para el desarrollo de las zonas rurales de la región que el Gobierno de Page ha tenido que devolver a la Unión Europea, los 70 millones de euros para ayudas a la industria agroalimentaria y el sector del vino de la convocatoria FOCAL que no fue publicada en 2016 o los 129 millones de euros de los Grupos de Desarrollo Local que no terminan de llegar a las zonas más necesitadas porque los tienen paralizados desde la Consejería.
La diputada regional ha recordado que el 90% del presupuesto del sector agrario de la región corresponde a fondos europeos y que lo único que tiene que hacer la Consejería es tramitar y gestionar, es un mero organismo pagador que no está haciendo su trabajo y que está perdiendo dinero que debería estar ya en el bolsillo de los agricultores.
Esta mala gestión también se está notando en el cobro de la PAC pues aún hay 10.000 agricultores y ganaderos que no han cobrado la PAC de 2016, unos 575 millones de euros que no llegan al campo y que siguen en la Consejería por la “inacción” del consejero.
Este “cúmulo de despropósitos” ha puesto en pie de guerra a todo el sector. Así, Merino ha recordado que “los agricultores ecológicos, los afectados por las zonas ZEPA y los cazadores ya han anunciado movilizaciones contras las medidas que está adoptando el Gobierno de Page”.
En su opinión, “Page no ha sabido entender que el sector agrario es un sector estratégico por el que hay que trabajar” y ha recordado que, además de perder dinero, está reduciendo el presupuesto para la Consejería de Agricultura ya que las demás consejerías incrementan su presupuesto una media del 5,9%, pero la de Agricultura lo hace solo un 0,9%, por debajo del IPC.
