viernes. 29.03.2024
SALUD

Educación sexual sin miedos

Os expongo alguna información importante para enfrentarnos sin miedo a la educación sexual de nuestros hijos. La curiosidad sexual es parte del desarrollo de un niño y niña. Desde pequeños empiezan a jugar con diferentes partes de su cuerpo y los genitales no son la excepción. Conforme crecemos esta curiosidad se va ampliando y las manifestaciones suelen ser más evidentes. De hecho se ha visto que los varones presentan erecciones desde que están en el vientre.

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Durante las primeras etapas del despertar de la sexualidad, todo gira en torno al descubrimiento y experimentación, mientras que en las últimas se centra en el desarrollo de la identidad sexual.

Algunos aspectos importantes del desarrollo normal de la sexualidad infantil son:

- El descubrimiento de las partes del cuerpo, la autoexploración y el contacto corporal y afectivo con otros cuerpos a través de manifestaciones físicas de cariño como lo son los besos, las caricias y los abrazos.

- El desarrollo de lazos afectivos con las personas que cuidan de los niños.

- El darse cuenta de su propio sexo y las diferencias sexuales entre hombre y mujer y niña y niño.

- La formulación de estereotipos y roles de género.

- El interés por conocer el cuerpo adulto y de otros niños.

- El interés por conocer sobre el origen de la vida humana y animal, la reproducción y luego las relaciones sexuales y de pareja en los adultos.

¿Cuáles son las etapas fundamentales del desarrollo sexual infantil?.

Niños de edad preescolar (0-4 años de edad)

- Desde el nacimiento hasta el año de edad los niños presentan erecciones durante el día, mientras se les cambia el pañal, al dormir y en el caso de las niñas presentan entumecimiento en los labios de la vulva y el clítoris sin embargo esto no quiere decir que haya excitación sexual como la entendemos los adultos.

- Entre los 2 y 3 años comienzan a sentir curiosidad por sus órganos sexuales. Cuando ya los pañales han sido abandonados, un nuevo mundo se abre para ellos, pueden percibir y ver con más facilidad y experimentar sensaciones que antes resultaban más incómodas.

- Estos niños manifiestan su conducta sexual a través de:

- La exploración de sus cuerpos a través del tacto (masturbación), ya sea en público o en privado. Las niñas se tocan la vulva con frecuencia y los niños juegan con su pene incluso se sorprenden y muestran a otros las reacciones que tienen cuando lo tocan.

- El rozarse sus órganos sexuales contra objetos o usando sus manos.

- Enseñarle sus genitales a otras personas, ya sea otros niños o adultos.

- Tratar de tocar el busto de sus mamás u otras mujeres.

- Querer estar desnudos.

- Querer ver desnudos a otros. El cuerpo de los adultos empieza a llamar la atención. Esta curiosidad por las diferencias entre su cuerpo y el de los adultos provoca que los infantes miren con curiosidad cuando se bañan con sus padres.

- Hacer preguntas con respecto a las funciones de su cuerpo y las funciones corporales de los demás.

- Discutir funciones corporales como orinar o defecar con otros niños

Niños pequeños (4-6 años de edad)

Los niños pequeños manifiestan su sexualidad a través de:

- Masturbación, ocasionalmente en la presencia de otros.

- Interés en ver a otras personas desnudas.

- Jugar juegos de papá y mamá o novia y novio.

- Desplegar conductas de noviazgo como agarrar las manos y besarse con otros niños o sus padres.

- Interés en hablar de sus partes sexuales.

- Interés en explorar las partes sexuales de otros niños.

- La curiosidad de los órganos sexuales aumenta conforme el niño o niña crece: se hace consciente de la existencia de dos sexos distintos y empiezan a presentarse juegos que incluyen la exploración de los propios genitales y de los de otros (los juegos como el doctor, al papá y mamá) suelen incluir besos abrazos y mirarse los genitales.

A partir de los seis o siete años estas conductas desaparecen, es como si a los niños no les interesara la sexualidad, ni las relaciones personales. A esta etapa en la psicología se le conoce como latencia, el niño se encuentra como en una “pausa” esperando a la pubertad.

Pre adolescencia; a partir de los 10-12 años se producen importantes cambios biológicos asociados a la sexualidad del niño. En esta etapa se activan las hormonas sexuales y los caracteres sexuales secundarios empiezan a desarrollarse. Así estas hormonas son las que estimularan los cambios físicos y psicológicos que determinarán más adelante la sexualidad reproductiva.

La adolescencia va de los 13 a los 18 años. Es importante que en ese momento los adolescentes se sientan cómodos preguntando a sus padres aquellas dudas que tienen. Con la llegada de la adolescencia los niños y niñas concluyen con su desarrollo sexual, en esta etapa se llega a desarrollar la identidad sexual.

Hay que recordar que en ocasiones los juegos y contactos llaman la atención y como padres debemos de enseñar ciertos límites. Explicarles que lo referente a sus genitales es íntimo y por lo tanto la conducta también. Aprender a que hay momentos y lugares apropiados para ello y repetirlo varias veces hasta que dejen de hacerlo en lugares inadecuados. 

Si esta conducta se presenta de manera frecuente, normalmente se debe a que el niño está pasando por un momento que les provoca ansiedad, por una situación que no pueden manejar. En este caso es importante acudir a un especialista por ayuda.

Educación sexual sin miedos