Según Emilia Osorio, hermana del desaparecido, en esta ocasión les acompaña un técnico sanitario por si las altas temperaturas provocan algún contratiempo en las personas que están ayudando en la búsqueda: “Tenemos que buscar a estas horas y no antes porque el sol debe estar arriba para que a través de la cámara subacuática se vean mejor los fondos de los pozos. Además, están utilizando un espejo que refleja en el agua a modo de linterna y así ayuda a ver ese fondo”.
Emilia también ha recordado como llevan toda la semana trabajando en esa zona para facilitar a los voluntarios la búsqueda, todo ello ayudados por un mapa de situación de los distintos pozos y norias en los que van a mirar.
En cuanto al estado de salud y psicológico de la familia, Osorio ha señalado que se encuentran muy cansados y ha incidido en el nerviosismo y malestar de su madre: “Cada vez que salimos a buscar a mi hermano se pone muy nerviosa y sigue en tratamiento psicológico, y todo esto lo tenemos que compaginar con nuestra vida personal, trabajos e hijos, y es muy duro”.
Hasta el momento llevan siete pozos revisados de alrededor de 2.000 que hay censados en la zona, moviéndose por aquellas que están más cercanas a la casa del desaparecido. Una vez descartados los primeros buscarán en otras zonas distintas.
Por su parte, Manuel Martín Portugués, miembro de los bomberos de Ciudad Real, ha expresado su deseo de seguir buscando el tiempo que sea necesario hasta encontrar a Ángel Osorio “sobre todo en pozos y norias cercanos a Valdepeñas donde se pueda haber tirado un cuerpo”. Igualmente, ha indicado que existe un pozo en el que tienen dudas “y al que tendremos que bajar nosotros a verlo porque está lleno de cajas y bolsas”.
