Para qué “los padres de la Constitución” incluyeron el artículo 155, si cuando alguna comunidad – como es el caso de Cataluña – “se le antoja anunciar su inmediata independencia unilateral” nuestro Gobierno en su clásica inacción “parece mirar para otro lado” y solo amaga “con aplicar la ley”, que es lo mismo que renunciar a nuestras garantías por velar la unidad de España.
Alfonso Guerra ya dice a Europa Press “que no se podrán calmar las ansias secesionistas por mucho que se acepte la imbecilidad de España, como nación de naciones”, y con la perplejidad que produce Pedro Sanchez le preguntamos “de cuantas naciones hablamos” ¿serán naciones todos los que quieran? Así veríamos la nación gallega, la nación vasca, la cartagenera, la valenciana, la aragonesa… y seguro que así llegaríamos a la nación manchega, incluso a la nación del Campo de Montiel…
El descrédito de la política llevado a la máxima expresión en forma de un golpe de estado “con sonido de sardana” … Hábil solución para evadirse de la justicia tantos corruptos del “España nos roba” dando cobertura a tanto delincuente que precisan crear un estado propio que ampare sus tropelías.
Como recuerda Alfonso Guerra: “El artículo 155 de la Carta Magna permite al Gobierno "adoptar las medidas necesarias para obligar" a una comunidad autónoma al "cumplimiento forzoso" de sus obligaciones legales o a proteger el interés general de España y para ello puede "dar instrucciones a todas las autoridades de las comunidades autónomas". Guerra recuerda a los "atemorizados" que son reacios a aplicarlo que ese artículo fue votado favorablemente por los nacionalistas cuando se redactó la Constitución. Y deja claro que no le vale la excusa de evitar un "choque de trenes" porque cree que "sólo hay un tren desbocado, con pilotos alocados" y enfrente "un Gobierno paralizado".
El exvicepresidente del Gobierno y ex 'número dos' del PSOE, Alfonso Guerra, piensa que Mariano Rajov debería explicar por qué no está aplicando ya el artículo 155 de la Constitución para frenar "los excesos de los secesionistas" en Cataluña. Si existe alguna razón, afirma Guerra, debería explicarla, "pues cada día se hace más difícil entender su parálisis ante la manifiesta rebeldía del nacionalismo catalán contra las leyes" que llevan su osadía a intentar contactos internacionales para apoyar su referéndum llamando a “España estado autoritario”.
No podemos olvidar dejar que haya “posturas cobardes" que no se atreven a aplicar ese artículo que ese artículo fue votado favorablemente por los nacionalistas cuando se redactó la Constitución.
Las primarias del PSOE parecían desterrar el sistema de “baronías” - residuos del viejo sistema feudal mantenía prebendas y poderes muy cuestionados. El apoyo comprometido por el Presidente de nuestra Comunidad a Susana Díaz nos hacía entrever su anunciada dimisión si fracasaba en su apuesta… perdió y de lo dicho “ná de ná” típica postura de la vieja política: “decir una cosa y hacer la contraria”: asombrar con nuevos remiendos, que en el fondo tratan de aumentar nóminas de “NACIONES”, que instauren el nuevo régimen.
Darío Pozo Ruz.