¿Cuándo surge esta asociación?
A raíz de formarse la cuadrilla de costaleros de la Virgen de Fátima, en el año 2011. Vimos que había un buen grupo y con muy buena convivencia y así decidimos alquilar un local y crear la asociación. Actualmente somos 30 costaleros y unos 40 socios, además contamos con 25 niños. Tenemos un paso en el que sacamos a San Antón y a la Virgen de Fátima.
¿Estos niños son los que sacaron la Cruz de Mayo?
Si, la verdad es que fue todo un orgullo porque pensábamos que no iba a haber nadie para sacarla y de pronto contamos con 25 niños, fue toda una alegría.
¿Pertenecéis a alguna Parroquia?
No, en este momento no pertenecemos a ninguna. Yo soy el capataz del Cristo, pero como hermano de la Hermandad y aparte soy el Presidente de la Asociación de Costaleros. Nosotros como asociación sacamos los pasos de San Antón en enero y la Virgen de Fátima. También salimos fuera, a la localidad de La Rambla en Córdoba, donde sacamos la Virgen de la Amargura en la procesión de la Madrugá.
¿Qué actividades hacéis durante todo el año?
Además de lo que te he comentado, este año conmemoramos el 25 aniversario de la llegada del costal a Valdepeñas y hemos realizado varios actos como homenaje a la primera cuadrilla: conferencias en cuaresma, la exposición del 25 aniversario y el cierre del año en el que haremos un DVD con todo lo que se ha hecho y una Misa.
Sois gente muy joven. ¿Esto os viene heredado?
En mi caso sí, mi padre fue costalero del segundo año en 1988 y mi hermano y yo lo hemos heredado. Nos viene de familia. Otros compañeros no, pero les viene por afición y ya vamos a por la tercera generación de costaleros.
¿Y qué supone para gente tan joven como vosotros esta tradición?
Hay que tener una fe muy clara hacia el Señor y la Virgen. Nos gusta ser costaleros porque tenemos esa creencia. Hay gente joven que prueba y dura dos años y se va porque ve que esto no es lo suyo y hay otros que empiezan y llevan ya diez años.
¿Tenéis que tener las espaldas fuertes para soportar el peso?
Hay que tenerlas, con una buena manera de trabajar y haciendo lo que debe hacerse no hay porqué tener problemas.
¿Cómo trabajáis?
Hace años se ensayaba de enero a Semana Santa, ahora y puesto que ya hemos trabajado mucho sabemos cómo hay que moverse bajo el paso. Un mes antes de la salida solemos hacer un par de ensayos, primero la Igualá y luego el ensayo general.
¿Qué es la Igualá?
Es el momento en el que se mide a los costaleros por la séptima vértebra cervical para meter a cada uno en la trabajadera. Van colocados de altos a bajos, los dos más altos van en los costeros, los más bajos de fijadores y el más bajito en el centro. Tiene su gracia, pero hay que saber lo que se hace para cuidar al costalero.
¿Qué supone para vosotros la exposición de los 25 años?
Es un orgullo, en ella se puede ver la primera foto que hemos encontrado en un archivo y en la hemeroteca, más lo que hay de Sevilla hasta lo último que ha sido la Cruz de Mayo. Tenemos un paso por cada 25 años del costal aquí en Valdepeñas.
¿Tenéis apoyo social en Valdepeñas?
La sociedad sí quiere al costalero, porque cuando vamos a un barrio a sacar los pasos la gente se vuelca, por ejemplo en Fátima o en San Antón, y si hacemos actos la gente va. El problema está más en las Hermandades, estas se han cerrado en núcleos familiares o de amigos y no les interesa que entre gente joven para intentar cambiar. Tarde o temprano la Semana Santa de Valdepeñas debe cambiar o sino yo creo que esto tiene mala solución. Cada vez salen menos nazarenos, tienen menos hermanos, el patrimonio de algunas hermandades lleva veinte años sin cambiarse. En Valdepeñas hay Hermandades que han evolucionado y esto les ha hecho cambiar y funcionan bien.
¿Qué les pedís a las hermandades?
Que abran el círculo a la gente, desde costaleros a hombres de trono. Nosotros nos ofrecemos a las Hermandades para estar con ellos. Por ejemplo, los de Fátima nos llamaron y estamos con ellos. Queremos ofrecernos a otras Hermandades con las que estamos en trámites y si nos aceptan estupendo, trabajaremos con ellas. Nosotros no les vamos a quitar el protagonismo a nada ni a nadie, lo único que queremos es ayudar a engrandecer la Semana Santa.
¿Qué diferencia hay con los hombres de trono?
Nosotros vamos por debajo y usamos el costal y ellos van por fuera y cargan sobre el hombro. El sentimiento es el mismo, la forma de caminar cambia. Nosotros tenemos pasos más largos o más lentos y ellos llevan la misma mecía.
¿Por qué no hay mujeres costaleras en vuestra asociación?
Porque no se ha dado el caso. No somos machistas es que queremos que siga siendo como en sus inicios. Tenemos niñas y si alguna vez una de ella, cuando crezca, quiere seguir, pues seguirá. De todos modos, ya hay hermandades que tienen sus costaleras
¿Qué mensaje le enviáis a la sociedad de Valdepeñas?
Que estamos abiertos a todo el mundo, a lo que nos ofrezcan en el mundo de la Semana Santa, somos un grupo abierto, aquí cabe todo el mundo. No cobramos por sacar pasos, lo hacemos por afición y devoción. Algunos miembros de la asociación también salimos en Sevilla.
