sábado. 20.04.2024

Al final se pudo comprobar que el equipo capitalino está varios escalones por encima de los valdepeñeros, equipo creado para dar el salto de categoría a Nacional y que está muy bien trabajado en todas sus líneas con buenas individualidades, pero que destaca por su orden táctico tanto defensivo como ofensivo.
La primera parte estuvo muy igualada, con alternancias en el control del juego y con llegadas sin mayor peligro por parte de ambos conjuntos. La presencia de más jugadores en el centro del campo por parte de los azules, hacía que éstos tocasen más y mejor el balón y que fueran adueñándose de la situación conforme avanzaban los minutos. Hacia la media hora de partido el árbitro pita penalti por manos de Paco, penalti muy protestado por los jugadores, banquillo y afición locales, ya que Paco se tira al suelo a tapar un tiro y el rechace le va al brazo, muy riguroso creemos nosotros, al final el número diez lo transforma, encarrilando así la victoria de su equipo (0-1, min.26). Minutos después buena jugada por banda de Paco para empatar el partido, llegada hasta la línea de fondo con centro a la cabeza de Alí que remata forzado alto. El equipo de Benito no le perdía la cara al partido y entró a vestuarios con la sensación de que a poco que le sonriera la suerte y trabajando como en la primera parte se podría empatar y plantarle cara al equipo de C. Real.
Pero esos deseos y esas sensaciones del paso por vestuarios se vieron truncadas a los pocos minutos de la reanudación, centro lateral sin peligro que no  bloca David y que aprovecha el diez para introducir el balón a puerta vacía (0-2, min.53). Con qué poquito, en cuanto a jugadas de peligro, los ciudarraleños se estaban llevando el partido, los cuales siguen a lo suyo bien posicionados en el rectángulo y controlando todas las facetas del juego. Los locales lo intentan pero hoy no es el día, algunos jugadores locales están desdibujados, por debajo de su nivel habitual y Benito aprovecha para mover el banquillo y dar entrada a gente de refresco, pero lejos de mejorar el plantel los cambios no mejoran la situación y el equipo da un bajón escandaloso a falta de veinte minutos para el final del partido, coincidiendo con el tercer gol azulón, otra vez del diez que en dos partidos de liga nos ha clavado seis goles, él solito. Visto lo visto, los visitantes que son ambiciosos y viendo las facilidades que los rojillos están ofreciendo, deciden ir a por una renta más amplia, cosa que consiguen con suma facilidad en los minutos ochenta y tres, ochenta y ocho y noventa, poniendo un desconsolador cero a seis en el marcador.
A lo largo de ésta semana Benito tendrá que trabajar en el plano psíquico para olvidar cuanto antes ésta dolorosa derrota, que dicho sea de paso, es la segunda de la temporada en casa, cosa que por otro lado no está nada mal.

 

Severo correctivo del Ciudad Real B al juvenil valdepeñero