En este taller, que empezó en noviembre y finalizará a finales de enero y que consta de 36 horas, se enseña a los alumnos a cocinar platos de la cocina tradicional, como por ejemplo, lentejas con chorizo, marmitako, tortillas americanas, milhojas de patata y lomo de orza, arroz con leche o salmón en papillote.
Desde la concejalía de Educación afirman estar "tremendamente contentos" con esta iniciativa y, en general con todos los cursos de la Universidad Popular, ya que con ellos se logra un doble objetivo: por un lado, se cubre el aspecto didáctico y, por otro, el social, es decir, "se crean grupos heterogéneos y homogéneos de personas que persiguen el mismo fin, la amistad; entre ellos interaccionan y consiguen tener un círculo de amigos más amplio", según Marín.
Además, el concejal de Educación se ha referido a la gran demanda con la que cuentan los cursos que forman parte del área de Gastronomía de la UP, entre los que figuran los de cocina para sorprender, cocina vegetariana, pinchos y tapas, cata de vinos o degustación de todos los sentidos.