El encargado de dirigir la cata fue Juan Antonio Megía, director técnico de la bodega, quien aseguró que en los dos últimos años su bodega no realizó catas por estar en obras.
Así, se cató el Corcovo Airen 2015 del que dijo quees “un vino emblemático de la bodega y que seguramente sea el más vendido en cuanto a número de botellas”; el Corcovo Tempranillo 2015, “un vino joven que demuestra su potencia”; y el Corcovo Reserva 2011, “un crianza en barrica y en botella”.
Además, también se cató en exclusiva un nuevo vino que la bodega pretende sacar en año que viene. Se trata, según explicó Juan Antonio Megía a los medios de comunicación minutos antes de comenzar la cata, de “una microvinificación de la variedad moscatel sacada de una plantación de moscatel que hemos plantado mi hermano y yo. El año pasado dio muy pocas uvas y lo que normalmente se hace es eliminar esa pequeña cantidad pero nosotros hemos realizado esta microvinificación que nos ha gusto mucho”.
Es por ello, y a fin de conocer los gustos del consumidor para lanzar el vino el próximo año, los numerosos asistentes a la cata tuvieron que rellenar una ficha de cata indicando qué sensaciones les produjo ese vino.
Por su parte, el presidente de los Jóvenes Amigos del Vino, José Luis Villegas, afirmó que “es un gran placer contar con una bodega que en poco más de 20 años se ha logrado hacer un hueco y está entre las bodegas con más renombre de Castilla-La Mancha”, ya que, tal y como continuó señalando, “sus vinos muy laureados y lo hemos visto tanto en nuestro comité de cata como en el de la Denominación de Origen Valdepeñas. Asimismo, también en los premios gran selección ha obtenido grandes premios tanto con sus vinos jóvenes tintos como con los jóvenes blancos”.
Por último, Villegas invitó a los asistentes a acudir a la próxima cata que realizará la Asociación el 1 de abril con Bodegas Maestro Tejero asegurando que “Alfredo Tejero es un viticultor que trabaja la biodinámica y sus vinos son muy particulares.
