El paso de la cuna a la cama está ligado a factores como el de la maduración y el crecimiento pero es importante saber cuál es el momento oportuno para sacarlo de la habitación de los padres.
Para ello hay que tener en cuenta varias cosas. Por un lado, si es el primer hijo o tiene más hermanos, ya que es normal que el primer hijo pase más tiempo en la cuna en la habitación de los padres. También hay que tener en cuenta su nivel de desarrollo y maduración, ya que cada niño es distinto, hay algunos que son más dependientes mientras que otros no lo son tanto. Y otro factor a tener en cuenta es el tamaño del niño, ya que en el momento en el que la cuna se le quede pequeña, tendremos que cambiarlo inevitablemente a la cama.
Para que el momento del cambio no sea dramático podemos seguir unos sencillos consejos como sacar la cuna del dormitorio y ponerla en la nueva habitación, en el mismo sitio que va a ocupar la cama.
Para irlo acostumbrando poco a poco, podemos abrir la cama para que se eche la siesta en ella y juegue también en ella durante el día. También podemos trasladar los juguetes y el chupete a la nueva cama y poner un colchón lo más bajo posible y colocar una barandilla o barrera protectora en el borde de la cama.
Y también es importante no hacer nunca el cambio con la llegada de un nuevo hermanito. Lo tendremos que hacer con tiempo prudencial antes o después del nacimiento. Y si tiene la edad suficiente, explicarle las razones del cambio.
