Un grupo de familiares acompañaron al secretario general de los socialistas solaneros, Luis Díaz-Cacho, en este sencillo acto, que se limitó a descubrir la placa y colocar el centro floral entre el respeto y silencio de los presentes. Díaz-Cacho pronunció unas palabras en las que quiso rememorar el valor de aquellos primeros fusilados. “Murieron por defender la palabra, la convivencia y la libertad”.
Incidió en que todos los actos celebrados en estos días han buscado la conciliación. “Nadie podrá decir que las actividades no han sido educadísimas”. También insistió en que el proyecto político que representa seguirá luchando “con la palabra, la poesía y la paz para defender nuestros ideales”. “Es un proyecto de igualdad con mayúsculas”.