De ascendencia italiana, Mihai Spatariu nació en Bucarest donde estudió Música y Bellas Arte. Ha realizado más de 300 obras de arte que incluyen varias técnicas de dibujo y pintura (óleo, carboncillo, lápiz, lápiz de color, acuarela, pastel, acrílico, pintura industrial). Entre ellas hay retratos, paisajes y murales, además de su producción pictórica visionaria y con toques surrealistas que expone en Ciudad Real a partir de este miércoles.
Una de sus creaciones, "Helios" participa actualmente en la exposición internacional "Design A Wish For Greece 2013-2014", junto a otras 87 obras de artistas de varios países con la que se pretende dar una mejor imagen de Grecia. Los carteles de las obras se exponen del 30 de noviembre de 2013 al 05 de Octubre de 2014 en Moscú, Tokyo, Mumbai, Dubai, Melbourne, Toronto, Nueva York, Sidney, Venecia, Roma, Madrid, Istanbul, Buenos Aires, Rio de Janeiro, Sao Paulo, Montreal, Toronto, Singapore, Shanghai, Londres, Los Angeles, Cape Town, Amman, Praga, Atenas y Santorini. El cuadro del artista afincado en Almagro fue seleccionado entre 1.300 participantes en el concurso.
Sus obras en Almagro cuelgan de las paredes del Hotel Retiro del Maestre, Hostal San Francisco, Restaurante La Posada y Luz Artesana.
Arte Visionario para una Nueva Era
La exposición que se inaugura el miércoles en el Café Loung Enzzo de Ciudad Real a las siete de la tarde se enmarca dentro de lo que se conoce como arte visionario que “fomenta el desarrollo de nuestra visión interna. Para encontrar el reino visionario usamos el ojo intuitivo interior: El ojo de la contemplación; el ojo del alma. Todas las ideas que tenemos como artistas se originan allí, la misión del artista es hacer el alma perceptible”, como explica el artista visionario estadounidense Alex Grey. De esta manera, el artista intenta hacer las verdades interiores visibles, audibles, o sensibles, de algún modo, manifestándoles en el mundo exterior, material (a través de la pintura y el dibujo). El artista visionario expresa a través de su creatividad sus vislumbres personales de la imaginación Divina y es una forma de “acceder al dominio trascendental."
