Desde el Consistorio calzadeño se cumple toda la normativa relativa a la tenencia de perros peligrosos, y se garantiza que el registro de este tipo de animales está actualizado. Ahora queda por comprobar que el Pitbull implicado en el suceso estaba en el registro municipal y tenía su documentación en regla.
El deseo del Ayuntamiento es que las causas de este triste suceso puedan esclarecerse cuanto antes, para lo que se pone a disposición de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de la autoridad judicial al objeto de colaborar en todas aquellas gestiones que puedan contribuir a una pronta resolución de las causas que han originado el suceso.