El director del centro, Javier Escobar, se mostraba satisfecho de la respuesta que habían tenido en toda la comunidad educativa del Santo en la que habían empleado varias semanas, a propuesta del departamento de lengua inglesa, en esta actividad del proyecto bilingüe.
Según Escobar todos se habían implicado y los resultados habían sido la indumentaria total para los participantes, así como las paredes en la decoración en el centro.
Asimismo señalaba que habían estudiado la película a conciencia, tanto los alumnos como los profesores y padres, siendo el resultado la preparación en el gimnasio de una comida para los pequeños, realizada a base de recetas terroríficas, con dedos sangrientos, bebidas simulando sangre, así como calabazas y galletas.
Además el espacio del gimnasio se había dividido en cuatro escuelas de magia, programando para después de la comida competiciones como carrera de escobas, decoración de escudos y talleres de maquillaje.