viernes. 03.05.2024

Numerosos socios se dieron cita en el auditorio del Centro de Artes, para conocer los cinco puntos del orden del día que contenía la asamblea, que se prolongó por espacio de casi dos horas y media.

Al finalizar la asamblea el presidente de Santa Catalina, Gregorio Martín Zarco,  destacaba los acuerdos referentes a las normas de campaña de la vendimia, sobre todo los relacionados con el equilibrio entre la vendimia que se realiza a mano y la mecanizada.

Al respecto señalaba Martín-Zarco que los socios debían pasarse una semana antes para informar sobre la cantidad  de uva que pensaban llevar la semana siguiente,  con el fin de adaptar la producción que recibe la bodega, que es de entre 800.000  a un millón de ki8los diarios, para hacer una elaboración que pueda ser bien dirigida por el enólogo y dando prioridad  a la vendimia realizada a mano, aunque compaginándola con la mecanizada.

Igualmente señaló Martín-Zarco que se pidió a los socios informen sobre la uva total que piensan llevar, ya que la bodega puede recibir durante la campaña  una cantidad que oscila entre los 32 y 33 millones de kilos de uva, ni menos ni más, ya que ello origina unos costes que finalmente van en perjuicio del socio.

Sobre las fechas de apertura y cierre de la bodega, señaló que el inicio de la vendimia es para el lunes 25 de agosto, mientras que el cierre lo tienen previsto alrededor del 12 de agosto, aunque piensan que es fácil concluir la campaña antes de que se llegue a esa fecha.

En cuanto a lo que se espera de esta campaña en calidad y cantidad de la uva, señalaba Martín Zarco que pese a haber  llovido poco en primavera y antes en otoño, las plantas no están mal, aunque no se encuentran  tan bien algunas de secano, por lo que se puede calcular que  el descenso en cuento a la cantidad puede estar entre un 30 a un 40 por ciento.

No va a ocurrir así con la calidad, matizaba el presidente de Santa Catalina, ya que las buenas temperaturas, con días cálidos y noches algo más frescas, puede repercutir en un año de calidad excelente.

En cuanto a otras diferencias con la vendimia del año anterior, señalaba Martín Zarco que debido a los problemas de envase que existieron el año pasado, todas las bodegas han ampliado acogiéndose a un programa de inversión de la Consejería, para contar con más envase y más tecnología, que derive en unos mejores vinos.

Reconocía que la campaña de vendimia del año anterior había marcado un antes y un después, incluso recordó que se habían realizado numerosos chistes que, a través de las nuevas tecnologías no daban buena imagen de  Castilla La Mancha y sus vinos, como si todo el vino de esa campaña fuera malo, lo que no era verdad en un 80 por ciento de la producción, ya que sólo fue malo el 20 por ciento, sobre todo debido a la botritis.

Añadía que “hemos aprendido mucho de la campaña pasada, ya que hay que llevar un plan para elaborar unos buenos vinos y la región debe estar por esas elaboraciones de calidad más que de cantidad.

Insistía en que los grandes rendimientos hay que pararlos, hay que producir lo que se vende y que exista un equilibrio producción y calidad, recordando que se ha marcado un límite de producción por hectárea y si se pasa el mismo no se podrá realizar la declaración.

Sobre el balance que hace del año relacionado con la exportación, indicaba Gregorio Martín Zarco que  el merado se vino abajo inicialmente, pero que la exportación está creciendo un poco y en la D. O. La Mancha se ha subido y espera que el precio siga aumentando.

En cuanto a la situación económica de la  cooperativa  insistía Martín Zarco que, pese a haber sido un año complicado en el que en el vino no se iba a ganar, sí se ha ampliado el contrato de los socios en otros 6 millones de kilos de entrega de uva, al mismo tiempo que recordaba la buena situación de la sección de aceite, ya que está subiendo el precio del mismo, sobre todo debido a la poca producción que se espera para la próxima campaña. 

 

La Cooperativa Santa Catalina acordó equilibrar la uva recogida a mano y la mecanizada