La Hermandad de San Sebastián, organizadora de las fiestas, finalizó muy satisfecha tras las celebraciones. Cada jornada contó con sendas verbenas que se alternaron con el tradicional ofrecimiento y puja, siendo amenizadas musicalmente por el Dúo Diamant. También actuó el grupo Salsa Flamenca en la noche del sábado, registrando un gran número de asistentes a la velada. De igual forma, se programaron juegos populares para los más pequeños, en una actividad que repite tras el éxito del año anterior.
El domingo por la mañana arrancó con la tradicional diana floreada a cargo de la Agrupación Músico-Cultural de San Sebastián, recorriendo distintas calles de la localidad. Seguidamente se celebró la solemne función religiosa en la ermita, siendo oficiada por el párroco Benjamín Rey. La eucaristía contó con la participación del coro de la Iglesia de Santa María y de la Agrupación Músico-Cultural de San Sebastián, siendo seguida por numerosas personas y miembros de otras cofradías y hermandades locales.
El ofrecimiento y posterior puja de regalos, unido a la venta de papeletas para un sorteo, dejó en las arcas de la hermandad la cantidad de 8.603 euros. Una cifra que supera en 177 euros, lo recaudado en las fiestas del año anterior, según anunció el presidente de la hermandad, Manuel Delgado. “La recaudación ha sido muy importante, teniendo en cuenta la situación de dificultades económicas para todos”, dijo el presidente, agradeciendo la colaboración de firmas comerciales y de todos los que han pasado por las fiestas durante el fin de semana.
El objeto que alcanzó un mayor valor en la puja fue un cuadro con la imagen de San Sebastián, por el que se pagaron sesenta euros. En cifras parecidas se cotizaron los jamones, quesos ó los artículos elaborados en pleita, así como un cordero que también alcanzó los cincuenta euros.
Delgado recordó que la recaudación obtenida servirá para sufragar algunas mejoras en la ermita. Por un lado, se bajará el púlpito para dar más amplitud al altar y se cambiarán las escaleras. En todo caso, se dejará un remanente a la espera de que se acometan las ansiadas obras de arreglo de la techumbre de la ermita, algo todavía sine die, según el presidente. Los primeros arreglos serán visibles en las próximas fiestas del mes de enero.
