El objetivo del taller de empleo es la formación de alumnos en tonelería y también el de reparar las barricas y los toneles de la cueva de la antigua bodega Los Llanos, que ya fue rehabilitada gracias a una inversión cercana a los 2 millones de euros y, con ello, ponerla en valor para hacerla visitable por el público, tal y como ha explicado el concejal de Cultura, Comercio y Turismo, Manuel López.
El taller de empleo tendrá una duración de seis meses, de manera que comenzará en junio y finalizará en noviembre y a través de él se contratará un director, un monitor de tonelería, un auxiliar administrativo y ocho alumnos. El plazo de recepción de solicitudes ya finalizó y ahora una comisión mixta formada por representantes de la Junta y del Ayuntamiento se está encargando del proceso de selección.
Las clases teóricas se impartirán en un aula del complejo deportivo de La Molineta, mientras que las clases prácticas tendrán lugar en las antiguas instalaciones de Protección Civil, aunque las prácticas reales se llevarán a cabo en la propia cueva.
Por su parte, el concejal de Obras y Urbanismo, Manuel Martínez López-Alcorocho, ha señalado que el hecho de que la Junta denegara este plan de empleo en 2013, cuando el Ayuntamiento lo solicitó por primera vez, y tener que ejecutarlo ahora una vez concedido plantea algunos inconvenientes a la empresa concesionaria de la gestión de la bodega Los Llanos, que en breve empezará a trabajar en la misma.
Es por ello que desde el Consistorio se están planteando soluciones prácticas para poder ejecutar las obras de la actuación integral en la cueva para causar las menos molestias posibles a la empresa que va a explotar la bodega Los Llanos.
En cuanto a la actuación que se llevará a cabo en la cueva, aparte del taller de empleo, se centrará sobre todo en la limpieza y acondicionamiento del espacio, que lleva muchos años cerrado. Así, se pintarán las paredes y techos, se colocará un solado que sustituirá al antiguo y que será idéntico a éste a base de baldosas de arcilla y se renovará la instalación eléctrica.
Sus accesos se harán totalmente accesibles y se pondrá en marcha el ascensor panorámico que baja a la cueva.
Además, una de las paredes de la cueva está cubierta por botellas antiguas de cristal apiladas, por lo que se instalará una vidriera de cristal para que el público pueda ver las botellas tal y como han sido encontradas.
