Martín ha señalado que tras documentarse de los proyectos que están en marcha y que afectan a los términos municipales de Torrenueva y Torre de Juan Abad, además de a Valdepeñas, dentro de los proyectos de cata, han decidido presentar alegaciones, y tras informar a los grupos de la oposición, por entender que “no se goza de la seguridad y de los informes preceptivos que garanticen que dicha explotación no va a generar ningún daño colateral ni al medio ambiente, ni al ecosistema, ni a la salud de los ciudadanos. A título personal y en nombre de mis compañeros el proyecto no nos gusta”.
El alcalde de Valdepeñas también ha recordado que sobre este tema está constantemente informado a través del Director General y el Consejero de Agricultura que según Martín “están abocados a esta circunstancia porque el Gobierno anterior dio permiso de prospección y estudio, durante el traspaso de poderes”.
En cuanto a los argumentos que se indican para personarse en los expedientes el alcalde ha destacado que uno de los proyectos afecta a Valdepeñas “es una explotación a cielo abierto donde se generan moléculas de polvo en suspensión, que dependiendo del aire podrían afectarnos e incluso depositarse en las aguas del pantano de la Cabezuela, que es sagrado para nosotros”. En este sentido, ha dicho que se debe realizar un informe técnico medioambiental que garantice que esas moléculas no llevan radioactividad”. Otro argumento es que la Confederación Hidrográfica del Guadiana se ha pronunciado en contra de la utilización de este pantano.
Martín ha indicado que no le salen las cuentas y considera que la empresa está haciendo “trampas en este solitario porque de los 10 proyectos de prospección y análisis de tierras que hizo ha comenzado con dos y cuando acabe con estos querrá otros dos y lo que está haciendo es troceando un proyecto unitario para evitar que la documentación medioambiental o el abastecimiento de agua no parezca tan voluminoso, y es ir sacando trozo a trozo lo que supuestamente en una unidad de acción no podría sacar”.
Considera que deberían dar voz y voto a las organizaciones agrarias y al Consejo Regular de la D.O Valdepeñas y a cuantos organismos vean que se pueda alterar “nuestro modelo de vida, porque es una falacia decir que después dejan el terreno igual que se lo encuentran, puesto que sabemos que el modelo productivo de nuestra tierra es la vid y el olivo, que necesitan años para estar en la situación que hoy están”.
Jesús Martín, se ha referido al trabajo que ha realizado con Ecologistas en Acción a través de una asesora de esta organización, que es de Valdepeñas y trabaja en Bruselas, quién ha aportado una documentación medioambiental de Europa y que indica que esto “afecta al hábitat de los animales de la zona como las águilas, perdiz roja y conejos, que son fundamentales para los Campos de Montiel”.
También se ha negado a que “nos dejen aquí la escoria y se lleven la riqueza a otro sitio, usando mano de obra barata, dejando cicatrices insalvables a cien años vista en nuestro terreno”. Martín, no ve la riqueza que se pueda quedar aquí puesto que todo esto creará “daños colaterales etenernos en la recuperación del ecosistema, medio ambiente, nuestro producto y además el agua, que ahí vamos a chocar de frente porque llevamos 12 años luchando para cerrar el ciclo del agua de Valdepeñas y que sea una ciudad que de seguridad en abastecimiento de agua”.
Finalmente, ha enviado un mensaje a la Administración en el cual explica que no se oponen al proyecto "aunque no nos gusta" pero hay que "ser muy escrupuloso y queremos garantias legales, informes medioambientales, médicos y geológicos que nos digan en que situación se queda y que riesgos se corren. En base a eso queremos que salvaguarden nuestro modelo de vida".
