Aparte del acto central militar, se celebró una jornada en donde no faltaron exhibiciones, escenificaciones de historia carrista, un tema táctico, así como dos conciertos, uno a cargo de la Sinfónica Municipal de Madridejos (Toledo), y otro que ha ofrecido la Unidad de Música de la Dirección de Acuartelamiento de Madrid, que en algunos de los temas interpretados ha contado con la participación de la banda de guerra del Batallón de Cuartel General de la BRIAC XII.
Otros actos estuvieron protagonizados por pasacalles de la banda de guerra, recreaciones históricas, visita a las salas históricas de los Regimientos “Asturias” 31 y “Alcázar de Toledo” 61, así como a los simuladores, incluyendo un concierto a cargo del coro de Alcobendas.
Centenares de personas estuvieron presentes en los mismos pues se trataba de una jornada de “Puertas Abiertas”.
La representación de la Real Cofradía de Nuestro Padre Jesús Caído y María Santísima de la Esperanza, agradecía al General Jefe de la Brigada Acorazada, José Conde de Arjona, así como a los distintos mandos del Batallón de Cuartel General que está a las órdenes del Teniente Coronel, Manuel Calabuig del Pico, las atenciones recibidas.
Hay que recordar que además del hermanamiento con la propia Brigada Acorazada, existe una vinculación especial de esta Corporación Penitencial con el Batallón de Cuartel General desde 1997, fecha de su creación, que es donde se custodia el banderín y el guión que donó el Ayuntamiento de Valdepeñas y la Cofradía de Jesús Caído, que este año conmemora su primer centenario.