Carvajal ha dicho sentirse “contento y desbordado” por la acogida y las atenciones recibidas en Valdepeñas. Hoy, ha procedido a leer algunos de sus poemas, donde se encuentran presentes alusiones al vino, que como el mismo reconoce “nunca ha sido un tema que yo haya tratado exclusivamente en un poema, pero siempre parece un motivo fundamental en los versos”.
50 años escribiendo a sus espaldas, donde asegura que “algo he dicho del vino, para bien y para mal, porque no todos los vinos son de la misma calidad ni provocan las mismas reacciones. El vino como todas las cosas de la vida es excelente si se mide bien, y es un problema cuando se convierte en un exceso o un defecto. Tiene la virtud de que anima y estimula, lo que no se puede buscar es suplir la falta de talento con un elemento como el vino, que tiene sus virtudes, pero que te puede convertir si no sabes usarlo, en un fracasado”.
Como poeta, actos como éste ha dicho “me parecen una maravilla, pero la poesía aquí va acompañada de muchas más cosas: un entorno arquitectónico sorprendente y el acompañamiento que el pueblo suministra”.
Al acto ha asistido el Alcalde de Valdepeñas, Jesús Martín, quien ha recordado como “cuando era un adolescente me preguntaba que será un poeta y mirando a Antonio, uno descubre perfectamente lo que un poeta es”.
Martín ha agradecido a Carvajal “que nos haya acompañado y revestido con su verbo, y espero que sea feliz entre nosotros, porque como granadino que es, sabe que entre el Norte y el Sur de España, Valdepeñas es la puerta que abre al mundo mágico de Andalucía y cierra por la que se sale de él”.
El acto ha sido presentado por el escritor Dionisio Pérez Venegas.
