Para el consejero “es un orgullo y un aliciente poder ampliar, mejorar y proteger los recursos culturales y patrimoniales de Castilla-La Mancha”, dado que una gran parte de los anuncios que Cospedal desgranó en su discurso de investidura “ya han visto la luz o están en un avanzado proceso de cumplimiento”, según Marín.
Entre las iniciativas que se han puesto en marcha destaca el impulso de la Red de Parques Arqueológicos de Castilla-La Mancha, con la ampliación y declaración del quinto Parque Arqueológico del Tolmo de Minateda en Hellín (Albacete), unido a un cambio de modelo de gestión de dichos parques, de manera más eficiente y profesionalizada. Así como la estrecha colaboración para la declaración de Almadén como Patrimonio de la Humanidad.
Asimismo, se ha declarado Bien de Interés Cultural la Fiesta de los Toros, protegiendo todo aquello que está relacionado con su entorno, como las dehesas, las ganaderías y, al mismo tiempo, al aficionado y a los profesionales del toreo. Además, se ha ampliado el catálogo de espacios y edificios protegidos como Bien de Interés Cultural, entre los que destacan la Iglesia de Santiago Apóstol en Cuerva (Toledo), la Ermita de San Pedro de la Mata en Casalgordo-Sonseca (Toledo), la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción en Tembleque (Toledo) y como la Iglesia Parroquial de San Cristóbal, en Almorox (Toledo).
A todo ello hay que añadir el impulso y desarrollo de nuevas normativas, como la actualización de la Ley de Patrimonio Cultural, en la que se incluye, dentro del ámbito de protección, el patrimonio denominado inmaterial, que comprende las tradiciones, fiestas o usos sociales heredados de nuestros antepasados.
Por último, el desarrollo de una nueva Ley de Museos de Castilla-La Mancha será toda una novedad y servirá para poner orden en el panorama museístico de la región.
