En la actualidad existen varias clases de portabebés, recogiendo los modelos más tradicionales como los fulares o los mei-tai, hasta las modernas mochilas, utilizadas incluso en senderismo de montaña.
Antes no existían coches para llevar a los bebés y eran las madres quienes se colgaban literalmente a sus crías para cruzar desiertos, montañas, selvas, trabajar en el campo, ir en busca de agua potable.
Respecto a la lactancia materna, los portabebés ayudan a que las mamás sientan el olor del bebé por períodos prolongados, el contacto físico, todas aquellas sensaciones que son necesarias para que se produzca la leche materna.
Un taller que se realiza cada año debido al interés que despierta por la practicidad y confort que brinda este sistema para la madre y el padre.