sábado. 20.04.2024
Opinión

La ilusión, el poder de la gente

Llevo militando en Izquierda Unida desde el 17 de Junio de 2009. ¿Por qué me acuerdo? Porque me afilié el día que cumplí 18 años. Siempre he tenido claro que, si querías que algo cambiase, debías empezar por ponerte manos a la obra, organizarte con otras personas, y cambiarlo.

opinion 6

Yo era ya militante antes de que surgiera el 15-M, pero es cierto que igual que el 15-M consiguió cambiar la sociedad en general, Izquierda Unida no fue menos. Nos hizo darnos cuenta de por qué habíamos fracasado una y otra vez al intentar aglutinar a toda la gente que lucha para que luchara con nosotras. Y es por tres razones: el Lenguaje, la Estructura, y la Actitud.

Los militantes de Izquierda Unida tenemos por costumbre vivir bien en la derrota. Para muchos, el hecho de tener un concejal, o dos, o tres, que sean llave de gobierno en el pueblo o en la región, ya les parece bastante. Pero compañeras, compañeros, así no se cambia la sociedad. Debemos salir a GANAR. Pero no a ganar para nosotras, ni a ganar porque sí, sino para ir delante, con los demás, a transformar este país.

Por eso es tan importante RECUPERAR LA ILUSIÓN, porque no se trata sólo de un cambio de actitud, no se trata sólo de una adaptación del lenguaje, sino que se trata de una vez por todas de poner la organización al servicio de la gente, de las trabajadoras y trabajadores de este país a los que nos hartamos de decir que representamos, pero a los cuales no dejamos participar.

Pensar en las primarias como un baile de familias, o de corrientes, es un grave error, precisamente porque la utilidad tienen las primarias es la de desarmar a las familias que llevan controlando la organización desde tiempos inmemoriales. Y es un error porque la única corriente que debe salir victoriosa de unas primarias es la corriente con la fuerza titánica del poder de la gente buscando derribar la Oligarquía y el Régimen del 78.

Por eso, yo en 2015 te voy a recomendar una cosa: Recupera la Ilusión, Recupera Castilla-la Mancha

 

La ilusión, el poder de la gente