En cada corro una historia, tortilla de patatas y algo fresquito hacían volar las historias de la guerra, el mundo y achuchones en un seiscientos.
Las más mayores sacaban sus fotos de cuando eran jóvenes, la del marido en la mili.
El primer reloj de oro y alguna baratija llena de un bonito pasado.
Adornadas con sendos Mercedes venidos de Alemania.
La vendimia ha terminado, hemos guardado a casi todos los santos. Llega la época de las conservas, los pimientos secos y el membrillo. Colores ocres invaden los parques, y recojamos la leña para el duro invierno.
Otoño lleno de noticias, las cuales haré poco caso porque para muchos cada día es el fin del mundo.
Para mí personalmente cada estación es un comienzo.