viernes. 03.05.2024
LAS HISTORIAS DE KUKA

Capítulo I. Un día cualquiera en el Supermercado

Aquí os presentamos la primera historia contada por Kuka. Esa mujer tan particular y especial que cada semana os irá contando, a través de las páginas de advaldepeñas, cómo ve ella la vida cotidiana. Esperamos que os guste.

Una mañana de esas que corta el aire, yo, con mi gabardina de Burberry, falsa, claro, y mi bolsa del Súper, ese innombrable sitio donde sus cajeras pintadas como puertas vocean las ofertas del día, me encuentro a la Puri:

Kuka: Nena, estás delgadísima –seré hipócrita, pensé-.

Puri: ¿Cómo te va la vida?

Kuka: Uy, genial, después de lo de Paco, ¡de muerte, nena!. Encontró trabajo rápidamente.

Puri: Hija, ¿y dónde se colocó?

Kuka: Pobre, después de lo del banco, y todo porque se equivocó en las cuentas ¡y las mandó a Suiza!. No era pa' tanto. Fíjate, en este país se lo llevan calentito a las Caimán y ni gota. Pues mi Paco desvió un plan de pensiones y van y lo despiden.

Puri: ¿Y a qué se dedica ahora?

Kuka: Pues lleva mercancías a la Junquera.

Puri: ¡A saber qué llevará el marido de la petarda ésta! –piensa Puri-. Oye,  ¿que sabes tú de la Carol?

Kuka: ¿Quién es Carol?

Puri: Ay, tanto té, (whisky, pa' más señas), te está dejando tonta.

Kuka: ¡Anda!, ésta, sí, la que le metíamos cucarachas en los pelos. Sí, hija, ahora lo llaman Bulling.

Puri: ¡Qué cosas!, ¿no?

Kuka: Sí. Antes cogíamos una rata muerta y se la echábamos a la monja en la cartera. Castigadas en la pared con seis kilos de libros en cada brazo, y ahora con tanto Facebook, que inventan cada porquería… bueno, algún nombre tendrían que ponerle... Pero eso sí, en inglés. Con lo castiza que soy yo, ¿por qué no lo llaman acoso, y nada más? ¡Lo que tendré yo que ver con la Isa esa!

Puri: ¿Qué Isa? ¿La Preysler?

Kuka: ¡Anda la otra! No me tires de  la lengua que estoy que trino. Las cajeras de los labios pintados me han dejado sorda.

Puri:  ¿Por qué no quedamos con Carol un día? Tú estás sola y aburrida y yo no tengo más crédito en la Visa, y ella está forrada.

Kuka: Pero si era una mojigata... ¿Dónde vamos?

Puri: ¡Tú calla! Que nos ponga de beber y de comer y le damos a la 'singüeso'.

Kuka: Tienes razón. Tanto té me tiene arruiná y, claro, Paco hasta la semana que viene no trae dinero de la Junquera.

Puri: Niña, ¿qué lleva tu Paco a la Junquera?

Kuka: Portes.

Puri: ¿De té?

Kuka: Más o menos. A mi Paco le van las aventuras. Es como un pirata en versión Alfredo Landa en el siglo XXI.

Puri: Hija, ¿y a ti no te trae ná?

Kuka: A mí sólo me trae las camisas sucias y los calzoncillos de cartón piedra. ¡El mú jodío! Llevo esperando el pedrusco ni se sabe…

Puri: Hija mía, cómo te sueltas de la lengua. Estás que no paras.

Kuka: Es que tengo ansiedad. Como no me tome un té, no me aguanto.

Puri: Pues tú relájate que nos vamos 'anca' la Carol, que le vamos a sacar una buena merendola.

Kuka: ¡No tienes cara tú ni ná, Puri…! ¿Me llevo un tupper?

 

 

Capítulo I. Un día cualquiera en el Supermercado