viernes. 17.05.2024
LAS HISTORIAS DE KUKA

Capítulo LIV. Vacaciones

Todos los años la misma rutina, llega agosto y servidora si puede se irá corriendo para cualquier sitio en la playita, buscando solecito y buen descanso. 

Todo esto, claro está, antes de que me pasen la nueva tasa por tomar a San Lorenzo. Pero no voy a hacer caso a los morbosos de los noticieros, que si España se quema, que si estamos ya psando hambres, todo por las nubes y demás calamidades.

Voy a ser un poco egoísta  y sentada en un sitio fresquito me voy a beber estos días sin olvidar que también me los fumaré.

Tengo que tener cuidado que algún listo dirá que incito a prácticas poco saludables por aquí.

Playas supuestamente abarrotadas, colas en los restaurantes, según ellos. ¡Pues no me creo nada!, ni de la gente que se ha ido ni de los desplazamientos. Esos sí, siempre ponen Benidorm abarrotado, imagen de bandera desde el Tío Paco.

Y no me quiero olvidar de los que vienen y van a los pueblos dejando las alacenas bien vacías a la vuelta.

Turismo de interior muy finolis, con el mercedes en la puerta, igual que aquellos maravillosos setenta.

Cuidado con el sol, comidas copiosas, no beber en exceso, en fin, solo me queda respirar que parece que es lo único sano.

Este año es diferente, me espera el mar, buenas puestas de sol y sobre todo paz. Me voy de vacaciones, ya volveré y seguro que dará miedo lo que me encontraré.

Pues después, al caer la hoja, al resto de los mortales se nos caerá el pelo.

Señores a pasarlo bien, cómo y con quién os apetezca, tened prácticas poco o nada saludables, que eso nos llevaremos a la tumba y dejémonos de tonterías que estamos de paso.

Desde un lugar de la playa cuyo nombre ya no me acuerdo gracias a una buena birra, le doy un buen beso a una rica sardina y con mucho amor embriagado se despide.

Kuka

Capítulo LIV. Vacaciones